El sistema no funciona.

Eso está claro después de una investigación de seis meses realizada por Colorado News Collaborative que reveló que la red de seguridad de salud mental del estado está “fallando” a los habitantes de Colorado debido a una falta de supervisión significativa para garantizar que los centros de salud mental financiados por el estado brinden los servicios que las comunidades necesitan.

COLab también descubrió que Mind Springs Health — uno de los 17 centros comunitarios de salud mental que en conjunto reciben más de $437 millones al año en dólares de impuestos del estado de Colorado para brindar servicios de salud conductual en 10 condados del Western Slope, incluidos Pitkin y Garfield — es un punto doloroso en particular. El condado de Eagle se sintió tan frustrado que formó un centro comunitario de salud mental separado por completo para satisfacer las necesidades que Mind Springs no tiene. El condado de Summit, donde los funcionarios han criticado abiertamente a Mind Springs, está cortando lazos con Mind Springs y planea unirse al nuevo centro del condado de Eagle.

Hans Lutgring, director del programa para pacientes ambulatorios del puesto de avanzada de Glenwood Springs en Mind Springs, sabe que hay una mayor necesidad de servicios de salud mental en Roaring Fork Valley de lo que el centro comunitario de salud mental de la región puede satisfacer por sí solo.

“Me sentiré muy cómodo y claro si digo que la demanda de nuestros servicios supera con creces nuestra capacidad … pero creo que cada entidad de atención de la salud del comportamiento aquí en el condado, y mucho menos en Western Slope, se enfrenta al desafío de ‘tenemos más demanda de la que tenemos capacidad y ancho de banda (para) servir,'” dijo Lutgring.

Esta no es una noticia particularmente alentadora, según Chelsea Carnoali, analista de salud mental de Pitkin County Public Health.

“Es realmente desafiante cuando alguien se encuentra en un lugar muy vulnerable y verdaderamente necesita esos servicios, y cuando hay una barrera para encontrar algo—cuando existe la barrera de tener el coraje y la inversión, especialmente si alguien está en medio de una depresión o realmente luchando con cualquier problema de salud mental y causa externa que pueda ser,” dijo Carnoali.

Carnoali reconoce el valor de identificar las barreras y los problemas que deben abordarse. También expresó su preocupación de que escuchar o vivir esas experiencias desalentadoras pueda disuadir a las personas de buscar ayuda.

Ese sería el resultado opuesto de lo que los funcionarios y defensores de la salud mental han estado buscando en su trabajo para reducir el estigma en torno a la búsqueda de ayuda y promover un giro cultural en la forma en que Roaring Fork Valley aborda la salud mental, dijo, razón por la cual ella y otros en la comunidad de salud mental del valle continúan promoviendo un mensaje de búsqueda de ayuda a través de una gran cantidad de recursos locales.

Mind Springs “no es lo único que importa,” dijo Carnoali. “Hay opciones.”

Gabe Cohen, un ex cliente y empleado de Mind Springs, experimentó la frustración del sistema de primera mano. Se está recuperando de la adicción; cuando buscó servicios en Mind Springs, dijo que enfrentaba largos tiempos de espera y recaería entre citas.

“Recuerdo haber ido allí porque quería ayuda y luego haberme ido angustiado” por el largo proceso que tendría que afrontar para seguir recibiendo servicios allí, dijo.

Eso no debe interpretarse como un reflejo de las personas que trabajan para Mind Springs sino del sistema en el que trabajan, dijo Cohen.

“Tengo amigos en Mind Springs. … Creo que contratan a personas excelentes que sí ayudan y quieren ayudar y tienen un gran corazón,” dijo Cohen.

Desde entonces, Cohen fundó Discovery Cafe, un centro de recursos en el campus de Colorado Mountain College, Rifle, para personas que se están recuperando de una adicción, que viven con problemas de salud mental, se encuentran sin hogar u otras dificultades. Hay clases de recuperación y sistemas de apoyo pero también alimentación, gimnasio abierto y otros servicios.

El Discovery Cafe no sustituye a la atención clínica. Pero ayuda a llenar los vacíos y ofrece apoyo a quienes lo necesitan mientras esperan la oportunidad de recibir una atención más formalizada, dijo Cohen.

Michelle Muething, de Aspen Hope Center, ve “beneficio y mérito” en tener un centro comunitario de salud mental y servicios especializados para ayudar donde sea necesario.

Muething es la directora ejecutiva de Hope Center, que se especializa en servicios de respuesta a crisis y educación para la prevención de crisis. Es solo una parte en un conjunto que incluye muchas agencias que se enfocan en la atención al paciente, así como otras que ofrecen otros sistemas de apoyo para personas necesitadas.

Kayla Bailey, directora del programa ambulatorio de Aspen para Mind Springs, considera que la comunidad de proveedores de salud mental del valle es un ecosistema “rico en recursos.”

“Creo que tenemos una comunidad realmente asombrosa que cree y pone mucho valor en asegurarse de que nuestra comunidad sea estable, específicamente con su salud mental,” dijo Bailey.

Sí, todavía hay necesidades insatisfechas, reconoció Bailey. Eso es particularmente cierto para las personas que no corren un alto riesgo de sufrir una crisis u otros problemas graves de salud mental y que sí tienen seguro porque hay un número limitado de proveedores que aceptan seguros en el valle. Es posible que esos clientes asegurados de bajo riesgo tengan que esperar algunas semanas para obtener una cita, mientras que alguien en crisis podría obtener los servicios mucho antes.

Pero también existe la voluntad de ayudar.

“Creo que hay suficientes recursos para superar esto, y suficientes personas que se preocupan y tienen los recursos para crear acervos que no están allí,” dijo Bailey.

Muething quiere dejar claro que la situación “no va sobre ruedas.” Identificar los problemas en el funcionamiento del sistema de salud mental de la comunidad del estado y resaltar las brechas que existen en los servicios es crucial para avanzar, dijo.

“El sistema tiene que sentir el dolor de una comunidad que pierde la fe en él para que se produzca el cambio. … Exponer la negatividad no es necesariamente algo malo, porque así es como cambian las cosas,” dijo Muething.

Las ruedas del cambio ya están girando, y lo han estado haciendo durante un tiempo, según Carnoali de Pitkin County Public Health.

Salud Pública del Condado de Pitkin tiene contratos con la sede de Mind Springs en Aspen para servicios de salud conductual comunitarios y escolares. Mountain Family Health Centers en Basalt tiene el subcontrato para la atención integral, que requiere un consultorio médico.

El apoyo del condado también viene con una responsabilidad y supervisión adicionales, según Carnoali; Los puntos de referencia que vendrían con cualquier contrato también se aplican a Mind Springs.

El contrato tampoco es uno que dure a perpetuidad, y el proceso para solicitarlo en el condado de Pitkin se abrirá en el 2022 inmediatamente después de que el condado espera completar una evaluación de necesidades y un análisis de brechas de la salud mental del sistema de recursos de la comunidad, dijo Carnoali. (Ese proceso de evaluación comenzó este otoño con una encuesta comunitaria y una encuesta específica del proveedor sobre salud mental).

Tener esa información ayudará a preparar a los funcionarios del condado para evaluar cómo podría y debería ser el apoyo en el futuro, dijo Carnoali.

“Estamos dando pasos adelante,” dijo. “Seremos proactivos para tratar de resolverlo.”

El periodista independiente de Glenwood Springs Post Rich Allen contribuyó a esta historia. Traducción de Edgar Barrantes.

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