Los líderes de Garfield Re-2 están decidiendo qué hacer después del mandato de máscara universal.

Una nueva propuesta de la junta, que el distrito está discutiendo actualmente con su asesor legal y los funcionarios de salud pública del condado de Garfield, dice que no se requerirá que los estudiantes usen máscaras en las instalaciones escolares. En cambio, el uso de máscaras será “muy recomendable,” tras cualquier exposición a COVID-19, los estudiantes y el personal “tendrán la opción” de ponerse en cuarentena.

La propuesta sigue una discusión reciente de los comisionados del condado de Garfield con respecto a los protocolos de COVID-19. La discusión finalmente dejó la política de protocolo pandémico en manos de los distritos escolares locales, como ha sido durante toda la pandemia.

Sin embargo, las máscaras desechables seguirán estando disponibles en todos los edificios del distrito.

“Sé que todavía hay personas vulnerables,” dijo la presidenta de la junta, Meriya Stickler. “Pero estamos cambiando el modelo.”

Desde el 27 de septiembre de 2021, se ha implementado un mandato de máscara en Garfield Re-2, mientras que los estudiantes y el personal actualmente deben permanecer en cuarentena si están expuestos.

“Creo que vamos en la dirección correcta,” dijo Britton Fletchall, miembro de la junta. “Estamos haciendo lo correcto.”

Fletchall y el miembro de la junta Tony May habían propuesto originalmente eliminar los mandatos de máscara a principios de enero. Aunque la propuesta de May y Fletchall no logró ganar terreno, la junta ordenó enviar una encuesta preguntando a los padres y maestros del distrito qué tan cómodos se sentirían con los nuevos protocolos de COVID-19.

La superintendente Heather Grumley y la superintendente asistente Lisa Pierce destacaron los resultados de esa encuesta durante la reunión del 26 de enero.

De los 850 empleados de Garfield Re-2, respondieron 435 personas. De los que respondieron, el 55% dijo que se sentía cómodo de estar en un entorno de aprendizaje en persona sin máscara, y el 45% restante dijo que no lo estaba.

En tanto, de las 3,500 familias del distrito, 402 padres respondieron a la misma pregunta. Entre los encuestados, el 67% dijo que se sentía cómodo con que los estudiantes fueran desenmascarados, mientras que el 33 % restante dijo que no.

“El ochenta y ocho por ciento de nuestras familias no respondió esa pregunta,” dijo Grumley.

Además de la encuesta, los funcionarios del distrito dijeron que la idea de desechar el mandato del uso de mascarilla surge a medida que los casos de COVID-19 dentro del distrito continúan disminuyendo.

“Mientras observamos nuestros datos esta semana, definitivamente hemos visto una disminución en los casos reportados de COVID en estudiantes y personal,” dijo Grumley. “Así que parece que alcanzamos ese punto alto el miércoles 19 de enero.”

Según el panel de control de COVID-19 en línea del distrito, había 161 estudiantes y 38 empleados en cuarentena el 10 de enero, que sigue siendo significativamente más alto que las cuarentenas entre principios de octubre de 2021 y principios de enero.

El distrito aún tiene que actualizar los números de cuarentena en línea desde la reunión de la semana pasada.

La nueva propuesta para eliminar las máscaras también se produce después de meses en que padres que asistieron a las reuniones de la junta escolar de Garfield Re-2 expresaron su firme oposición a los protocolos de COVID-19.

Para el 13 de octubre, la ex miembro de la junta, Katie Mackley, citó los gritos en las reuniones de la junta escolar y las amenazas a su seguridad y la de su familia como razones para renunciar oficialmente.

Otra larga sección de comentarios públicos siguió a la discusión sobre el COVID-19. Quienes se oponen al mandato del uso de máscaras continuaron argumentando que los mandatos están afectando la salud mental de los estudiantes. Por otro lado, los defensores del mandato dijeron que tienen niños que son muy vulnerables a experimentar problemas de salud si contraen COVID-19.

El ex miembro de la junta de Garfield Re-2 y padre, John “Brock” Hedberg, argumentó que el distrito, que generalmente impone las reglas de COVID-19 bajo la guía de Salud Pública del Condado de Garfield, nunca tuvo el mandato legal de imponer requisitos de máscara en primer lugar.

Hedberg dijo que, en cambio, el distrito continuó diciéndoles a los electores que serían responsables si no hubieran seguido las pautas.

“Esas son dos mentiras que su abogado de distrito, que empleamos como electores y que ustedes han contratado, les dijo,” dijo. “Así que le envié un correo electrónico y nunca me respondió.”

Angela Strode, una abogada local de padres y práctica familiar, refutó abiertamente la afirmación de Hedberg y dijo que los distritos escolares tienen el mandato federal de proporcionar un entorno seguro para todos los estudiantes.

Además, aconsejó al distrito que avance lentamente en cualquier retroceso.

“Nuestros casos siguen estando por las nubes,” dijo. “Entonces, hablar de reversiones en este momento de algunos de los protocolos es difícil de digerir.”

“También les pediría que no conviertan a nuestro distrito, a nuestros niños y a nuestros maestros en conejillos de indias para una reversión.”

Una vez que los funcionarios de salud pública y el abogado del distrito escolar revisen el nuevo protocolo COVID-19, la junta votará para decidir si elimina el mandato de máscara.

Puedes contactar al reportero Ray K. Erku al 612-423-5273 o rerku@postindependent.com.